Pedro Nakada nació en El Agustino y tiene 49 años. En el 2006 fue condenado a prisión por el asesinato de 25 personas. Es conocido como "El Apóstol de la Muerte”. Dice no ser un criminal, sino alguien que ha liberado a la sociedad de homosexuales y vagabundos, y que continuará su labor cuando salga de la carcel

Domingo Norabuena, “El Monstruo del Garrote”, vivió en Huaral y fue condenado a prisión por el asesinato de 15 personas.

Mail Malpartida, el Degollador de Oxapampa, fue condenado a prisión por el asesinato de 21 empresarios, mineros y granjeros, en las regiones de Huánuco y Junín.

Nicolás Gutiérrez, “La Bestia de Parcona”, fue condenado a prisión por el asesinato de 13 niñas, todas ellas menores de 9 años, luego de abusar sexualmente de ellas en la región de Ica. 

Alex Maquera, el Loco del Martillo, fue condenado a prisión por el asesinato de 10 jóvenes entre 7 y 17 años en la ciudad de Tacna.

La lista de asesinos en nuestras cárceles es larga, pero lo más aterrador es que cualquiera de ellos podría postular a la presidencia del Perú una vez cumplida su condena. La ley peruana considera que, al salir de la cárcel, los criminales están “rehabilitados” y aptos para representar y personificar a la Nación.

Hace unas semanas Integridad presentó un proyecto de ley para evitar que asesinos y secuestradores puedan ser presidentes del Perú, incluso luego de haber cumplido su condena (https://bit.ly/3wdVKDc). A los pocos días, el congresista Carlos Anderson presentó un proyecto mejorado que viene siendo debatido en la Comisión de Constitución del Congreso (shorturl.at/gjknw).

Juntos podemos poner fin a esta pesadilla apoyando el proyecto del congresista Anderson para evitar que asesinos y secuestradores puedan postular a la presidencia del Perú. Únete a esta iniciativa y hagamos que el congreso nos escuche. Tu participación es más que importante.